Un recuerdo que me vino así de repente:
Mi hermana y yo, de chiquitas, sacábamos libros y libros de la biblioteca del colegio. De esos llenos de imágenes y colores. Y todos los años, cuando se acercaba fin de año, mi madre nos hacía buscar y buscar todos esos libros, agarraba la pila entera, y nos llevaba al colegio, para que diéramos la cara frente a las bibliotecarias, por supuesto con una caja de chocolates importados de regalo, para que les fuera más fácil perdonar el retraso…
jueves, 2 de diciembre de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario