miércoles, 28 de octubre de 2009

Te dejo...

Exijo respeto. ¡¿Por qué cuando uno dice por teléfono “Te dejo que estoy llegando tarde” recién ahí al interlocutor se le ocurre empezar esa gran disertación de todo lo que le sucedió en su ocupadísimo día?!

martes, 27 de octubre de 2009

Te presto mi Liquid Paper

Todo estudiante creo que debería de compartir conmigo las ganas de acogotar al chico de al lado, ese mismo que siempre siempre escribe con lápiz, siempre siempre se equivoca, y siempre siempre borra con la goma con una fuerza que sacude la mesa cual terremoto, arruinándote el subrayado con regla que te estaba quedando tan bien, y soplando para tu lado los desechitos de la goma ya borrada.

lunes, 26 de octubre de 2009

Correo de voz

¿Cómo es que siempre que un auto tiene la voz esa que te avisa que no te pusiste el cinturón o que la puerta está mal cerrada, y siempre que los celulares tienen la función esa de que vos le enunciás a quién querés llamar y el celular te contesta “Llamando a”, y siempre que los ascensores tienen el parlantito que te va indicando oralmente a qué piso vas llegando, y siempre que hay un correo de voz… Cómo es que siempre la voz es una voz femenina?

domingo, 25 de octubre de 2009

Ascensor emotivo

Uno se emociona… Cuando abre el mail y ve que tiene 5 correos nuevos en el buzón de entrada… Uno se emociona… Pero resulta que eran spams proponiéndote un “penis enlargement” o un vuelo París-Antananarivo a 10 euros y cadenas, enviadas por aquella compañera de clase de tercero de escuela que nunca más volviste a ver pero que te guardó en la privilegiada lista de contactos de los que reciben este tipo de cosas.
El ascensor emotivo no hace bien.

sábado, 24 de octubre de 2009

¿¿Mi casa es tu casa??

¿Quién inventó eso de que “Mi casa es tu casa”?
Un tipo garronero, desubicado, y muy propenso a aburrirse sólo, seguro…
Porque quiero decir, yo tengo familia y amigos, que significan todo para mí, para los que mi casa es su casa, todo lo que tengo es para ellos y si me piden un riñón les daré dos.
Pero si sos un simple conocido, seriously, ¿qué esperabas?
No, no...
¡¡no te pongas cómodo que mi casa es mi casa!!

viernes, 23 de octubre de 2009

¿Qué es eso?

Yo soy mujer, así que no pasa nada. Pero si fuera hombre, me molestaría bastante eso de entrar a la ducha y ver la bombachita ahí colgada secándose.

lunes, 19 de octubre de 2009

Dos y dos son cuatro

Yo me puse a hacer cálculos… En mi casa, los únicos que tomamos agua sin gas somos mi hermano y yo. Y hay sólo una botella de agua sin gas en la heladera porque a mi madre no le gusta atiborrar los estantes. Y esa botella es sumamente paqueta, decorada y todo, divina, pero sólo contiene tres cuartos de litro. Y generalmente aconsejan tomar dos litros de agua por día. Y mi hermano toma toma toma, pero es incapaz de rellenar la botella (tengo fuertes sospechas de que no sepa dónde está la canilla siquiera). Y el resto de la familia, que se supone prefiere la soda, si abre la heladera y es más fácil de acceder a dicha botella, no lo duda. Resultado final: ¡yo relleno la botella un promedio de cinco veces al día! (y la cantidad de agua fresca que tomo al día tiende a cero)

domingo, 18 de octubre de 2009

¿Dónde lo metí?

Hay algo que me resulta particularmente estresante: No acordarme de dónde metí algo, pero sí acordarme perfectamente del momento en que me dije “Esto lo tengo que guardar en algún lugar seguro, no sea cosa que lo pierda” o “Esto lo tengo que dejar medio a mano que ya lo voy a volver a usar”. Y ustedes pensarán que por todo lo que cuento he de ser muuuy lela, pero vamos, admitámoslo, ¡a todos nos sucede más seguido de lo que nos gustaría!

Mi laptop querida

En esta época de tecnología, de blogs, de cuentas en facebook, de listas de contactos, lo que uno tiene más privado es su computadora… Y por eso encuentro atroz que la gente chusmee la laptop de uno.
“¿Quiénes son los del fondo de pantalla? ¿Eso cuando fue?”
“¡Qué pocos contactos tenés en facebook! ¿No aceptás a nadie?”
“¡Esta versión de Msn es muy vieja! ¿No querés que te instale la nueva?”
“¿Usás Limewire para bajar cosas? Sabés que hay un montón mucho mejores…”
“¿Este blog que está en tu página de inicio de quién es? ¿Es tuyo? ¿Vos tenés un blog?”
Ahhhhhhhhh es mi vida y si se me ocurre poner como fondo de pantalla la foto de un miembro masculino ¡¡la pondré sin necesidad que nadie opine!!

sábado, 17 de octubre de 2009

Podría

Se me podría haber perdido el Mp3… O me lo podrían haber robado, o me lo podría haber olvidado en algún lugar. Pero no, lo que se me perdió fue el cargador, cuestión de que el Mp3 quede ahí, en la mesita, desde donde me puede mirar, burlón, como diciendo, “Sí sí, acá estoy, pero no me podés usar. Andá nomás al gimnasio sin mí, tomáte el colectivo sin mí…”

Se me podría haber perdido una de las llaves del candado, como para poder usarlo con la otra, porque viste que los candados por lo general traen dos llavecitas. Pues no, lo que se me perdió fue el candado, o sea que ahora me clavé con las llavecitas colgando molestamente del llavero, que no puedo tirar por si al candado se le ocurre reaparecer…

Me podría haber olvidado de la contraseña, así por lo menos cliqueaba en la salvadora opción “Se me ha olvidado mi contraseña” y respondiendo a esas preguntas del estilo “¿Cuál es tu restaurante favorito? ¿Cuál era el nombre de tu primer mascota? ¿Cómo se llamaba tu maestra de tercer grado?” conseguía una nueva. Pero no, de lo que me tuve que olvidar fue del nombre de usuario, porque claro, ya estaban todos tomados así que tuve que ser demasiado creativa… Y no funcionó.

Me podría haber olvidado la billetera al salir de casa, pero no, de lo que me olvidé fue de poner la plata adentro, o sea que la billetera, que me ocupa más o menos la mitad de la cartera, la cargué igual, de manera totalmente inútil.

Y de este tipo de cosas me han sucedido miles. De más está decir que me molestan bastante.

jueves, 15 de octubre de 2009

Acá me bajo yo

Yo viajaba muy tranquila en el colectivo, cansada, aburrida y con la cabeza contra la ventana, cuando de pronto oigo que una señora, muy perdida, pobre, le pregunta al chofer dónde bajar para llegar adonde quería ir… El chofer, aproximadamente gentilmente contestó que no tenía idea, pero otra señora, con una vida propia muy poco entretenida, por lo visto, entró en la conversación:
-“Te tenés que bajar ahora, en la próxima”
Pero ella no era la única persona en ese momento en el colectivo con escasa vida personal: también había un señor, sentado en las filas centrales, que no pudo contenerse:
-“No, no, para llegar ahí te tenés que bajar en la esquina entre…”
Y ahí arrancó la discusión de dónde habría de bajar la pobre señora, discusión a la que se fueron incorporando poco a poco más interlocutores. Y la señora seguía la discusión con la vista, intentando acertar a quién hacerle caso… Y su cara denotaba un claro desconcierto, sobre todo porque si la primer señora que intervino tenía razón, se tendría que haber bajado seis paradas atrás…

¡ Qué cosa que odio quedarme sin baterías en el Ipod cuando tengo que viajar en colectivo!

miércoles, 14 de octubre de 2009

Cooooffeeeeee

Yo conozco una personita que me es bastante cercana, que cada vez que quiere un café y le da pereza hacérselo ella misma se para al lado mío y empieza a decir “Coooooffeeeeeee” así, en inglés y todo, con voz bien chillona y en un volumen suficientemente alto. Y lo repite a intervalos más o menos de cinco segundos. Y a mí me exaspera tanto, pero tanto, que termino parándome, dirigiéndome a la cocina y ¡haciéndole un café!

martes, 13 de octubre de 2009

Me dueeeeeeermo

Tan pero tan aburrida fue la clase de la que acabo de salir, que en lo único que pensé durante las tres horas que duró (sí, tres horas) fue en este grano maldito que me salió y en lo bien que se sentiría explotarlo. Y para no romper la armonía del blog aclaro que odio esa clase.

lunes, 12 de octubre de 2009

¿Y eso quién te lo enseñó?

Yo me pregunto, ¿no? ¿Cómo hacen los niños de las películas para ser tan sabios? En serio, cada vez que el protagonista, o uno de los personajes principales es un chico, no se sabe cómo pero termina haciendo el papel de adulto en su entorno. Es el que da los mejores consejos, el que saca a todos adelante, el que mejor entendió el sentido de la vida… Para hacerla corta, es el que la tiene clara. Y yo la verdad que conocí bastantes niños en mi vida, y de todos me enamoré, y a todos los adoré, y todos me hicieron alguna vez alguna observación que me dejó boquiabierta… pero ninguno compuso esos monólogos existencialistas que los niños promedio de película suelen hacer...

domingo, 11 de octubre de 2009

Ay que me lo como...

Yo tengo un primito que lo adoro, y él es medio malcriado y caprichoso, y yo lo adoro, y hace cualquier cagada, y yo lo adoro, y dice cualquier ordinariez, y yo lo adoro.
Y cualquier cosa que me pida yo se la doy, y lo que quiera que yo haga, yo lo hago.
Es que lo miro y me derrite, no se imaginan lo que es… Es el niño más gracioso del mundo, el más tierno, el más lindo…
Bueno, en fin, a lo que iba: una cosa que me crispa profundamente es que la gente exterior a la familia no entienda por qué esa adoración. O sea, cada vez que me ven hablarle como si fuera la persona más importante del mundo, o concederle algo medianamente inconcebible, o aplaudirle algo que no debería de hacer, la gente mira como diciendo “¿Y a ésta qué le pasa? ¿No escuchó lo que dijo el nene? ¿Por qué le habla con esa voz de tarada?”. Y yo digo, ¿no?... ¿Qué pudo pasarles en la vida que los hizo tan insensibles? No puede ser que lo miren y no se derritan automáticamente… Asúmanlo, en casa él es el rey y estamos orgullosos de que lo sea, así que miren para otro lado si no lo entienden!

sábado, 10 de octubre de 2009

¡Ojo! ¡No me ensucies el auto!

Esa hipocresía de la gente absolutamente maniática con el auto que lo tiene que tener impecable, con olor a cuero nuevo y perfumol todo el tiempo… Y para lograrlo, por supuesto, cada vez que come un chicle, abre un paquete nuevo de perfumol o se suena los mocos con un pañuelo descartable tira los desechos por la ventana!!!
Esa hipocresía es una cosa que me altera me altera me altera muuuuuuucho.

viernes, 9 de octubre de 2009

La clásica historia de Betty la Fea

Algo que me pone de bastante malhumor es eso de que en las películas nos hagan creer que la fea, sólo por ser buena, siempre se transformará en linda. Sinceramente yo creo que deberían de prohibir contar ese tipo de historias, porque puede inducir a graves errores. Aceptémoslo chicas, algunas nacimos feas, y todas las buenas acciones del mundo no van a impedirnos morir feas…

jueves, 8 de octubre de 2009

El chat de los adultos

Una cosa muy graciosa (o muy irritante, depende con el humor que se esté) es chatear con adultos. Hay algunos que ya hace bastante que se adaptaron, es verdad. Pero taaaantos otros siguen luchando…
Mi madre, por ejemplo, logra exasperarme cada vez que chateamos. Primero, porque no entiende que el dibujito de la camarita te indica si la camarita está enchufada o no, y si el dibujito de la camarita aparece, la camarita está enchufada, y si querés ver la camarita, apretá el dibujito de la camarita y la camarita aparece… Nada muy sofisticado, ¿no? Pues parece que sí, porque cada vez que me ve conectada la conversación arranca por:
“¿Dónde está la cámara? ¿Por qué no te puedo ver? ¡Poné la cámara que te quiero ver!”
Segundo, porque parece ser que escribir, esperar respuesta y leer respuesta, como si fuera una conversación normal, son instrucciones demasiado difíciles de seguir. No sé cuál es la historia, si escribir y leer al mismo tiempo requiere demasiada atención, pero mi madre escribe escribe escribe, pregunta todo lo que se le ocurre, se saca todas las dudas, y yo contesto cosa por cosa, y al ratito me empiezan a llegar una por una todas las preguntas de nuevo…
Y tercero, porque los adultos (de nuevo mi madre a la cabeza) no se saben despedir por chat. Siempre llega un momento en que le digo “Bueno mamá te dejo que tengo que hacer tal cosa” y siempre es en ese preciso momento que a ella se le ocurre bombardear a comentarios, chusmeríos, preguntas, cosas… Y si yo digo “Un beso” ella contesta, y si yo digo “Chau” ella contesta, y si yo digo “Hablamos más tarde” ella contesta… Y siempre contesta o sea que la despedida no se lleva a cabo por un rato laaaaaargo.

miércoles, 7 de octubre de 2009

Lo moral e inmoral en las pelis

¿Alguna vez entendieron por qué los ricos en las películas siempre son tan malos? Y no sólo malos, sino que además no tienen ni moral ni escrúpulos ni una gota de cariño por nadie, y claro, están más solos que el uno…
Y los pobres, sin embargo, son la encarnación de la belleza y la integridad. Siempre son gente con principios, incapaces de hacer el mal. Y están rodeados de personas que los quieren, y entienden el significado del amor, y se las ingenian para conseguir trabajo y entretenerse sin todas las cosas materiales que los ricos tienen pero no saben disfrutar porque son malagradecidos y no saben valorar nada.
Bueno, es verdad, alguna excepción hay, a veces ponen a algún rico que hace de bueno, pero ojo, hay que justificarlo, entonces la solución es evidente: ¡se enamoró de una pobre!

O sea...
¿Cuál es la moraleja? ¿Seamos pobres que si te va bien te convertís en un tarado que nadie puede ni ver?

domingo, 4 de octubre de 2009

Mi estado

Yo me pregunto, ¿no? Esa gente que se pone de nickname en el msn o de estado en facebook frases describiendo detalladamente cada paso que dan… ¿No tienen sentido de la privacidad? ¿No tienen respeto por el tiempo que nos hacen gastar en leer cosas que no interesan?
Sinceramente, ¿qué necesidad de enterarte que…

- Hoy almuerzo con los chicos y de noche fiesta de despedida de Pichu en la casa de Pochi
- Redecoré mi cuarto y cambié el color de las paredes porque el magenta me había cansado
- Me hice el test del amor eterno para toda la vida y me dio que el nombre de mi alma gemela empieza con P. ¡No lo puedo creer!
- Estoy haciendo la entrega de Economía descriptiva, escuchando Satisfaction de los Rolling, la versión del 1997 y viendo en E! One hundred and One Celebrities Makeovers
- Estoy en el baño, hablando por teléfono con Nachi, almorzando en lo de Chucho, ……

… ?